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Mostrando entradas de 2011

HOMO HABILIS: ¿EL HOMBRE COMO DEPREDADOR?

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En 1960 Jonathan y Mary Leakey descubren en la garganta de Olduvai, Tanzania, una mandíbula inferior con trece dientes, un molar inferior, dos parietales y 21 huesos de dedos, mano y muñeca izquierda, datados luego en 1,75 millones de años, pertenecientes a un macho de 12-13 años. Conocido el hallazgo como OH 7, fué considerado junto a los hallazgos de 1963 de N. Mbuika en el mismo sitio y datados en 1,7 millones de años (OH 8: mandíbula, maxilar y dientes de una hembra), para formular una nueva especie en 1964 por Louis Leakey, Tobias y Napier. Se lo llamó habilis (habilidoso) debido a que sus restos aparecen asociados con industria lítica. El registro fósil de esta especie es abundante. Básicamente se agrupan en: a) Fósiles de Olduvai: OH 7,  OH 8, OH 13 (cráneo, mandíbula y partes postcraneales de individuo jóven de 1,66 millones de años), OH 16 (cráneo de jóven), OH 24 ("Twiggy": cráneo encontrado por Peter Nzube en 1968), OH 62 (cráneo, maxilar con dientes y

HOMO RUDOLFENSIS: UN HOMO QUE NO TERMINA DE CONVENCER

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En 1972 un miembro del equipo de Richard Leakey llamado Bernard Ngeneo, encontró en Koobi Fora, a orillas del lago Turkana, un cráneo problemático estimado en 1,88-90 millones de años de antigüedad, llamado KNM-ER 1470. Inicialmente se lo consideró parte de los fósiles de la especie Homo habilis. En 1986 Valerii P. Alexeev propuso que se trataba de una nueva especie a la que bautizó como Pithecanthropus rudolfensis. Luego lo rebautizó como un Homo. Sin embargo la polémica continuó hasta hoy en día. En 1999 Wood & Collard lo rebautizan como Australopithecus rudolfensis. A partir del descubrimiento del Kenyanthropus platyops por Meave Leakey en 1999, ésta propone crear la especie Kenyanthropus rudolfensis en 2001. Finalmente en 2003 Tobias concluye que se trata de un Homo habilis. En 1991 se encontró en Uraha, Malawi, un maxilar inferior (UR 501) de 2,4-2,5 millones de años atribuído a la especie rudolfensis. La idea de que se trata de una especie de Homo contemporánea de

PARANTHROPUS ROBUSTUS: ¿NO TAN ROBUSTUS?

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En 1938, Gert Terblanche, alumno de Robert Broom, encuentra la mitad del cráneo de un homínido adulto (TM 1517) de 2 millones de años de antigüedad en Kromdrai, Sudáfrica. Sorprendido por la naturaleza masiza de los restos Broom los catalogó como Paranthropus robustus. En 1948 Broom descubre nuevos restos en las cuevas de Swarktrans: una mandíbula con dientes (SK6) de 1,5-2 millones de años. Apoyado en otros fósiles descubiertos junto con Robinson (los cráneos SK 48 y SK 79, también de 1,5-2 millones de años) en Swarktrans, Escoba los clasifica como Paranthropus crassidens ("dientes gruesos") en 1949. Si bien todavía hay quien acepta tal distinción, la mayoría prefiere atribuir los supuestos fósiles de crassidens a robustus. Precisamente son los fósiles de Swarktrans los más abundantes: 126 robustus/crassidens (y 6 erectus-ergaster) hallados junto a instrumentos de piedra y hueso y evidencias de temprano uso del fuego (atribuído a erectus-ergaster) contribuyen a

ZINJANTHROPUS: PARANTHROPUS BOISEI. ¿EL CASCANUECES?

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El primer hallazgo correspondiente a esta especie es un cráneo, el OH 5, de 1,75 millones de años, descubierto el 17 de julio de 1959 por Mary Leakey en Olduvai, Tanzania (apodado como "Hombre Cascanueces"). Inicialmente bautizado como Zinjanthropus ("hombre del Zinj"; el Zinj es una región del África Oriental) boisei (en honor al antropólogo Charles Boise), fué reclasificado como Paranthropus por John Robinson en 1960 y como Australopithecus por Richard Leakey en 1964. Precisamente éste descubre otro cráneo de la especie de 1,7 millones de años, en Koobi Fora en 1969 (KNM-ER 406). En 1970 encuentra un semicráneo en el mismo sitio (KNM-ER 732), al parecer correspondiente a una hembra de la misma antigüedad. Koobi Fora es el sitio que más fósiles de boisei a proporcionado. En Olduvai se han encontrado unos pocos restos fragmentarios posteriores al hallazgo del OH 5, en los Lechos I y II, datados en 1,85 y 1,20 millones de años. Los hallazgos de Koobi Fora se encu

EL OTRO CHIMPANCÉ

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 “Por eso una es la muerte de los hombres, y de las bestias, e igual la condición de entrambos: como muere el hombre, así también aquellas mueren: del mismo modo respiran todos, Y NADA TIENE EL HOMBRE MÁS QUE LA BESTIA: TODO ESTÁ SUJETO A VANIDAD” Eclesiastés III: 19, Biblia Vulgata Latina, trad. Phelipe Scío de San Miguel En 1962 los doctores Emile Zuckerkandl y Linus Pauling fueron los primeros en observar que existe una relación entre la cantidad de sustituciones aminoacídicas de la hemoglobina  (o cambios fijados en proteínas genéticas) y su tiempo de divergencia. Tal relación es llamada tasa de sustitución (cantidad de sustituciones por unidad de tiempo) y se ha establecido en un principio que es constante, comportándose como un “reloj molecular”. Una vez que se establece dicha tasa de sustitución de las mutaciones en el ADN de una especie determinada es posible elaborar una historia evolutiva susceptible de ser corroborada por la evidencia fósil. Nuevas observaciones (

¿NUEVAS ESPECIES DE AUSTRALOPITHECUS?

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Actualmente se han catalogado unas 9 especies de Australopithecus, incluyendo a los "gracilis" (anamensis, afarensis, aficanus, ghari, bahrelgazali y sediba) y a los "robustus" o Paranthopus (aethiopicus, boisei y robustus). De hecho algunos incluyen al Kenyanthropus dentro de este género. Si aceptamos la tesis de Wood y Collard (1999) de que habilis y rudolfensis deben ser considerados como Australopithecus entonces estaríamos llegando a las 12 especies. No hay consenso tampoco respecto a la consideración que debe dárseles a los Ardipithecus y los otros géneros (Orrorin y Sahelanthropus). Los Australopithecus se diferencian de Homo en varios aspectos fundamentales. En primer lugar presentan una estructura claramente trepadora y arborícola. El bipedismo estaba asociado a la locomoción y no a la postura. Se ha sugerido que se trató de una adaptación para el consumo de pequeños frutos en árboles de bosque abierto, así como una forma de explotar diversos há

KARABO: AUSTRALOPITHECUS SEDIBA. LA NUEVA ESTRELLA

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"Sediba" significa "manantial" en idioma sesotho. Es el nombre con el que Lee Berger, profesor de biología evolucionista en la Universidad de Witwatersrand (Johannesburgo, Sudáfrica), bautizó a la supuesta nueva especie de Australopithecus al presentarlo en la revista Science en 2010. Precisamente el hijo de Berger, Matthew, descubrió el 15 de agosto de 2008 una mandíbula de la nueva especie. Poco después se encontraron restos de dos individuos en Malapa (la Cuna de la Humanidad), una hembra adulta de 20 o 30 años, y un niño macho de 11 o 13 años popularizado como "Karabo" ("la respuesta"). El sediba despertó una gran euforia en parte de la comunidad científica que lo consideró el ancestro directo de Homo. Por supuesto que reaccionaron aquellos partidarios de que tal filiación debe ser atribuída a Kenyanthropus. Y también aquellos que no aceptan ninguna de las dos filiaciones.  Sediba está datado entre 1,97 y 1,75 millones de años. Prese