LOS PRIMEROS HUMANOS MODERNOS




Los restos de Klasies River Mouth, Sudáfrica, datados entre 134.000 y 75.000 años, Border Cave, Sudáfrica, de 70.000 años y los de las cuevas de Qafzeh y Skhul, Israel, fechados en 90.000 años, se consideran los primeros representantes de la variedad moderna del Homo sapiens: la subespecie llamada por algunos Homo sapiens sapiens. Al menos en Israel existe constancia de que los humanos modernos coexistieron con neanderthales (hubo ocupación neanderthalensis en Kebara, Tabun y Amud entre 110.000 y 55.000 años) y, según algunos autores, también se mezclaron con ellos. Parece evidente también que los neanderthales terminaron desplazando o absorviendo a esta primitiva población asiática de Homo sapiens hace 90.000 años.

Las principales características anatómicas de los humanos modernos serían las siguientes: cara pequeña, desprovista de prognatismo, dientes y maxilares también pequeños, mentón prominente, cráneo redondeado por detrás, frente alta, arcos supraorbitarios muy reducidos, extremidades largas con huesos de paredes delgadas, manos delgadas y gráciles, huesos púbicos gruesos y cortos.Un trabajo de 2012 del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, del Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid, a cargo de Markus Bastir, también ha demostrado que la especie humana moderna posee el lóbulo temporal y el bulbo olfativo un 12 % más desarrollado que en neanderthalensis y que en cualquier otra especie de homínido. Se ha señalado que la especie Homo sapiens es relativamente frágil anatómicamente y se especula que su éxito radica en una complejización de su sistema nervioso central motorizado por una mutación que le permitía metabolizar el almidón (mutación que surge como resultado de la presión motivada por la pérdida de capacidad de metabolización de la vitamina C y de la celulosa por parte de sus ancestros). Ésta capacidad exclusiva de aprovechar nuevas reservas energéticas de manera óptima le proporcionó una ventaja comparativa en la competencia por el alimento con otras especies de homínidos. Contrariamente a especies como neanderthalensis, especializadas en la caza de grandes animales, el Homo sapiens era una especie que cazaba en forma colaborativa animales más pequeños, pero que prefería la recolección, la pesca, el consumo de mariscos o el cleptoparasitismo (robo de animales abatidos por carnívoros).

Respecto a los presuntos ancestros del hombre moderno existe también una gran controversia. Ya hemos visto que algunos autores han construído la especie Homo helmei, donde algunos de sus representantes (niveles superiores de Laetoli y río Omo, Singha, Border Cave, Florisbad, Cave of Hearths, Jebel Irhoud I, Kibish I y Klasies River) presentan rasgos modernos predominando sobre otras características "arcaicas". Es posible que los representantes "arcaicos" de Homo sapiens hayan vivido hace alrededor de 200.000 años en África, pero sólo hay cierto consenso para considerar como miembros plenos de la especie moderna a los hombres de Kibish y Herto, junto a los de Klasies River. También los restos de Singha (Sudán) y Border Cave (Sudáfrica) han sido adjudicados a Homo sapiens.
Deben considerarse también rastros asociados a Homo sapiens las cuchillas hechas con método Levallois y tratamiento a base de calor, más 57 piezas con pigmento rojo de Pinnacle Point, Sudáfrica, datadas en 165.000 años,  las encontradas en el Congo (puntas de flecha y herramientas para pescar en hueso) fechadas en 90.000 años, las puntas líticas y de hueso encontradas en Stillbay y Howiesons Poort (Sudáfrica), datadas en 60-70.000 años y las pinturas abstractas en ocre rojo de la cueva Blombos (Sudáfrica), de 70.000 años de antigüedad.  Respecto a los restos de Klasies River se han encontrado rastros de utilización de ocre rojo, quizá usado para pintarse y también para realizar símbolos en las cuevas. También existen evidencias de la práctica del canibalismo.
Existe alguna polémica respecto a los artefactos y lo que parecen rastros del primer ritual conocido (una roca que semeja la cabeza de una pitón y pinturas de supuestos animales sagrados de los San: una pitón, una jirafa y un elefante) en la Rhino Cave (en las Colinas Tsodilo de Sudáfrica) presentados por Sheila Coulson de la Universidad de Oslo en 2006 y datados en 70.000 años. Nuevas dataciones con termoluminiscencia y radiocarbono sugieren fechas mucho más recientes. Las Colinas de Tsodilo son un sitio sagrado para los San y las pinturas rupestres de ese sitio se remontan a 24.000 y 30.000 años  de antigüedad. 
Los estudios del genetista Spencer Wells sugieren que los actuales San o Bosquimanos son descendientes directos de los primeros humanos modernos. De la época de estos hombres modernos se cita la aparición del ancestro común masculino de la variedad moderna, el llamado "Adán cromosómico", fechado entre 75 y 140.000 años recientemente se lo ubica en el entorno de los 350.000 años). Recordemos que el ancestro femenino común llamada "Eva mitocondrial" fué datada en 200.000 años.
Hace 60-70.000 años permanecían en África unos 40 linajes mitocondriales, mientras que dos de ellos colonizaban Asia. Precisamente en África se han rastreado los linajes más antiguos entre los khoisan, seguidos por los pigmeos de África central, los hadza de Tanzania, los dinka y nilóticos de Sudán, los oromo, amhara, falasha y otros pueblos de Etiopía y en muchos otros pueblos africanos que se han mestizado con aquellos primitivos representantes de la especie moderna.










Un estudio realizado por investigadores dirigidos por la doctora Sarah Tishkoff de la Universidad de Maryland (EE.UU.) sobre muestras de ADN mitocondrial de mil tanzanianos, sugiere que las etnias de Etiopía y Tanzania constituyen el linaje genético más antiguo de la especie humana moderna. Precisamente los grupos étnicos durunge, gorowa, sandawe y datag son poseedores del linaje mitocondrial más antiguo registrado, el de la llamada "Eva mitocondrial". Los pueblos mencionados, al igual que los hadza del lago Eyasi, constituyen pueblos de cultura cazadora-recolectora y nómade, en franco peligro de desaparición. Sus tradiciones se remontan a épocas remotas del pasado humano y son objeto de estudio por equipos de investigadores etnólogos. Presentan costumbres claramente monogámicas, con escasa incidencia del adulterio, cuestión que ha llamado la atención de muchos investigadores. También el hecho de que las mujeres parecen elegir a los hombres de voz profunda como pareja (Coren Apicella, del Departamento de Antropología de la Universidad de Harvard). El estudio de la investigadora Apicella ha arrojado, efectivamente, el dato de que aquellos individuos con voz profunda y grave tienen mayor éxito reproductivo que los varones con voz aguda.
Coren Apicella también ha investigado el aspecto social en las sociedades hadza, descubriendo que poseen un complejo y sofisticado sistema de redes sociales comparable al moderno sistema digital. En efecto entre los hadza la
popularidad de alguien se mide en el número de amigos que posea. Las relaciones se construyen en base a la homofilia (cooperación entre individuos iguales), la búsqueda de personas físicamente más aptas y el parentesco (si bien se establecen vínculos estables con no parientes).
Los estudios de Apicella sugieren que los primeros Homo sapiens podrían exhibir similares comportamientos sociales, construyendo extensas redes de cooperación entre hordas o clanes. 

Un reciente estudio a cargo del genetista Michael Hammer de la Universidad de Arizona, sobre muestras de ADN de san, biaka y mandinka (o mandé-tan), ha detectado un 2 % de posible ADN perteneciente a una especie desconocida que no sería Homo sapiens. La posible hibridación se dió hace 35.000 años y viene a echar por tierra la idea de que los africanos son los únicos humanos modernos puros. Otros estudios han revelado una incidencia que oscila entre el 1 y el 4 % de ADN de Neanderthal y Denisovano en los humanos euroasiáticos. De todos modos la teoría de Hammer no es tan sólida como los trabajos sobre híbridos humano-Neandertal-Denisovano. Por el momento es difícil de verificar y además se ha propuesto que la presencia del presunto ADN desconocido podría deberse a un simple mestizaje dentro de la misma especie.







Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

LA HUMANIDAD PERDIDA (IV): GIGANTES DE AUSTRALIA

LOS PIGMEOS DE MONTAÑA DE NUEVA GUINEA

ARDIPITHECUS RAMIDUS:¿PRIMEROS INDICIOS DE VIDA SOCIAL?